Se conoce por Arte Post-Paleolítico a las representaciones artísticas, que se realizaron en la Península Ibérica, en el período posterior al Paleolítico (tal y como indica su nombre)

Este arte, abandona las cuevas del período anterior, realizándose en pequeños covachos y abrigos, en los que se pueden observar sin ningún tipo de problema, a pesar de que su acceso, sea un tanto complicado.

Son pinturas, en las que solo podemos observar tres tonos, rojo, negro o blanco, en la que se aprecia una ausencia total de la perspectiva, mayor dinamismo y estilización de las figuras que se representan.

Estilísticamente, podemos encontrarnos con dos tipos de técnicas y representaciones:

-Arte Levantino Clásico, en el que veremos dos tipos de representaciones, una de tipo más naturalista y otra de corte más estilizada, en la que se deforma de manera intencionada la figura del hombre.

-Arte Macroesquemático, con figuras muy esquematizadas y de gran tamaño, con un sentido de tipo simbólico.

El Neolítico, hace su entrada en la Península Ibérica, a través de la costa Mediterránea, en la que se han encontrado los indicios más antiguos de este período, en la zona del Levante.

Su desarrollo, tuvo lugar en diferentes lugares de la Península, entre los que se incluyen, las costas Atlántica y Cantábrica, además de algunos otros asentamientos en el interior de la meseta, en los que se dio un Neolítico muy heterogéneo, con el que surgirán a finales de este periodo, grupos culturales bien diferenciados.

Cronológicamente se divide en 3 etapas:

   -Neolítico Antiguo (5200-3500 a.C), en el que se produce el arte macroesquemático y las cerámicas de tipo inciso.

   -Neolítico Medio (3500-2800 a.C), en el que se realizan cerámicas de tipo liso e impresas, además de desarrollarse el hábitat en poblados.

   -Neolítico Final (2800-2500 a.C), en esta etapa, comienzan a darse los primeros ejemplos de estructuras de tipo megalítico, en el sur pe

La mayoría de las personas, aunque no lo sepa, conoce al menos, un tipo de construcción de tipo megalítico, ¿Cuál? Stonehenge, un tipo de megalito, realizado por la agrupación de menhires en círculos, delimitando un espacio cultual o ritual.

Pero, existen muchos otros tipos de megalitos, que vamos a ver a continuación:

-De tipo simple

- Menhir, conocido por su aparición en los famosos comics de Asterix y Obelix y que es una piedra de gran tamaño, hincada en el suelo, señalizando algún tipo de lugar de culto.

- Crómlech, que son alineaciones de menhires

-Henge

-Sepulcros Megalíticos

- Corredor, compuesto por una galería, que se diferencia perfectamente y una cámara sepulcral, en la que se depositan los cadáveres.

-Galería, contiene los mismos elementos que la anterior, pero, la galería y la cámara, son bastante complicadas de distinguir.

-Dolmen, son construcciones, en las que se ha prescindido totalmente de la galería de acceso, realizándose únicamente, la cámara sepulcral.

El Megalitismo (Mega-Grande, Lithos-Piedra) es uno de los fenómenos constructivos, más conocidos de todo el mundo. Su característica principal, tal y como indica su nombre, es la utilización de piedras de gran tamaño, con las que se creaban monumentos arquitectónicos, cuyas funciones son de tipo funerario o ritual.

 

Sus construcciones, suelen utilizarse como enterramientos de tipo colectivo, en las que se depositaban varios cuerpos, durante un periodo más o menos dilatado en el tiempo, con su correspondiente ajuar funerario.

¿Por qué se realizaban? Existen múltiples teorías que nos hablan de las posibles razones, que llevarían a estos hombres a realizar semejantes construcciones, entre estas teorías están:

-La función de marcar o señalizar un territorio, como propio de la población que se encontrara viviendo en ese momento por la zona.

-Destacar algún tipo de fenómeno natural o lugar de culto

-Manifestación del poder y prestigio de la población que lo construye, demostrando a los grupos vecinos, que son una sociedad totalmente cohesionada

La cerámica, surge como respuesta para almacenar y conservar, los nuevos productos alimenticios que se obtenían de la agricultura y la ganadería. Estos primeros recipientes, de formas bastante simples, se fabricaban para el uso exclusivo de la comunidad (aunque posteriormente se convierten en productos de intercambio con otras sociedades)

Además de utilizarse, en distintas partes del mundo, para la conservación de líquidos y alimentos, también tuvo otros usos como son: la fabricación de todo tipo de revestimientos, silos para almacenar el cereal, sillares de adobe e incluso, pequeños elementos de adorno personal.

A lo largo del Neolítico, se fueron creando nuevos tipos de recipientes, en los que se fueron introduciendo de forma paulatina, los primeros intentos de decoración y embellecimiento de las piezas. Estas decoraciones, estaban realizadas con elementos que se encontraban en el entorno y con las que se hacía una pequeña presión en el barro fresco, para crear la forma deseada.